Love this place - unique healthy vegetarian food served with wonderful energy!
Jennifer Gabriela Hernandez Vazquez
+5
Excelente servicio, y los alimentos deliciosos, están muy bien servidos y si celebran cumpleaños esta lindo el detalle del postre. En relación precio-calidad se me hizo muy adecuada. Justo me entregaron mi pastelito con las campanadas de la iglesia 🥰
Este lugar tiene todo 5 cinco estrellas!!
Nosotros no contábamos con reservacion sin embargo el personal que te recibe muy cordial nos indico que esperaramos 10 min lo cual si ocurrió...las bebidas son increíbles, las entradas la comida y el ambiente ni se diga...ofrecen variedad de música una chica que tocaba el violín así como un trapesista... tienes que conocerlo y probar los postres.....
Bonito lugar para comer y tomar unos buenos cocktails.
El tiempo de espera es de unos 20-30 min si no llevas reservación.
Y la verdad no nos encantó el lugar donde nos sentaron (barra) les recomiendo hacer reservación para que no les suceda eso.
Su personal de seguridad es un poco grosero, mi papá se acercó a ver los pasteles que tenían en vitrina y se le pusieron enfrente, lo cual se nos hizo bastante grosero.
Es una terraza muy bonita, excelente ambiente, los postres súper delis, no tuve oportunidad de consumir alimentos salados pero todo se veía muy rico.
Los costos si están un poco elevados a comparación de otros restaurantes en San Miguel pero creo que vale la pena por el ambiente y el la vista, me gustaría regresar e ir de tarde noche porque el atardecer se ha de apreciar muy bonito.
Ame el lugar increíble todo. La comida muy muy rica y la vista espectacular!!! Los tragos también están delis.
Vistas geniales, precios en rango, buena comida, buen servicio, solo en el proceso de reserva son excesivos en el número de veces que te contactan para confirmar y también es friki que te carguen un monto de reserva en tu tarjeta por si cancelas en OpenTable.
Otra cosa, su encuesta de salida está sesgada, ojo.
Por ese motivo no les pongo cinco estrellas pero el sitio es súper lindo, si volvería.
Buena vista hacia la parroquia, la comida es rica pero nada del otro mundo.
Excelente experiencia gastronómica en Guanajuato. Quince ha logrado fusiones sorprendentes con toques de la comida peruana y nikkei en el corazon de México y sin renunciar a su raíz azteca, pero con calidez atrevimiento y elegancia.
Platos bien logrados. Atención esmerada, en un ambiente acogedor en las terrazas de esta casona renovada junto la emblemática parroquia de San Miguel de Arcangel.
Imperdible los ceviches y sushis para la entrada. Nos atrevimos con el costillar de cordero y el lomo saltado con risoto. Tambien probamos el robalo al panko...
El servicio de los mozos tiene 5 ★ Les dejo algunas fotos.
Buen lugar para comer algo en San Miguel de Allende. Lo mejor es la excelente ubicación, pues se encuentra a una cuadra del jardín principal y tiene una vista de la parte trasera/lateral de la parroquia.
Tienen una gran variedad de alimentos, tanto para los desayunos como para las comidas (Carnes rojas, pescados, veganos, etc) los cuales son buenos sin llegar a ser excelentes, lo único malo es que las bebidas no son su especialidad, pues muchas tienen sabores artificiales y/o se preparan con alcohol económico, lo que genera sabores muy genéricos por lo que se está pagando por esa bebida.
El consumo promedio por persona (Alimento y Bebida) es de $500 a $600 pesos mexicanos.
Para encontrar lugar y ser atendido rápido es prácticamente necesario hacer una reservación, de esta manera ya te tienen tu mesa preparada, sin embargo, en caso de no llegar te hacen un cargo a tu tarjeta.
NO cuenta con estacionamiento, por lo que será necesario que busques algún lugar en la calle o en los estacionamientos públicos disponibles al rededor de la ciudad (Hay varios a 2-3 cuadras). En fechas concurridas se vuelve prácticamente imposible encontrar lugar para estacionarte, por lo que es mejor ir con DEMASIADA anticipación para no perder tu reserva y paciencia para estacionarte. Es ciertas ocasiones es mejor buscar lugar fuera del centro de la ciudad y caminar.
Hay que subir un montón de escaleras, la atención es genial y la comida estaba muy rica. Las vistas desde la terraza son agradables y si recomendaría.
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