La comida me pareció muy rica, buena la cantidad en las porciones, al igual que la presentación.
Yo pedí chilaquiles rojos con pollo y mi novio molletes ( recomiendo ambos)☺️
Los puntos a considerar es que es un lugar pequeño, no cuenta con estacionamiento y no tiene clima (aunque el día que asistimos, no hacía falta).
La atención es muy buena, la comida también solo que deberían de ponerle atención a la calidad de los ingredientes todos los días pues el pico de gallo en mis chilaquiles arruinó el sabor porque ya estaba pasado y sabía a fermentado todo el show 🥺 y el café no sabía bueno, sabe mucho a cafetera. Me encantó la presentación de las enchiladas suizas. Y fue muy amable la señora al ofrecerle agua a mi perrito, volveremos para darle otra oportunidad :)
Apenas ayer sábado fui por primera vez. Me gusto mucho la comida y la atención en detalles que muchos pasan desaparecibidos. Hace poco hablabamos mi novio y yo que es muy molesto que la mayoría de los meseros solo le desean a el un buen día o que disfrute la comida.
Me gusto que el mesero del panqueque hizo de forma general sus buenos deseos y preguntarnos por separado que si nos gusto la comida. Son detalles que son agradables y muchas si nos fijamos. Volveremos a ir sin duda.
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